La actividad extractiva tiene una marcada presencia en la región latinoamericana, la cual se expandió de manera sustancial durante las últimas décadas, a raíz del aumento de los precios de minerales e hidrocarburos que prácticamente se cuadriplicaron entre 1991 y 2011.
Con ocasión de la Conferencia Mundial de EITI, las organizaciones de sociedad civil que subscribimos este pronunciamiento ponemos de manifiesto que: